LONDON, I LOVE YOU ( Part 2)

Una de las cosas fundamentales para mí a la hora de organizar un viaje a Londres, es asegurarme de que el sábado por la mañana estaré allí para poder visitar uno de mis lugares favoritos, PORTOBELLO. Soy consciente de que hay que madrugar para poder llegar antes de que el resto de los turistas armados con sus cámaras, paraguas y demás artilugios hagan imposible el pasear por la calle, también tengo claro que hay que hacer verdaderos esfuerzos para poder meterte en el vagón de metro que te lleva a Notting Hill, y también tengo en cuenta que para poder entrar en mis tiendas favoritas voy a tener que hacer cola o caminar como en una procesión entre estanterías y percheros para poder comprar alguna prenda...Pero todo esto pasa a un segundo lugar, cuando al llegar a casa tengo tiempo para disfrutar de los pequeños tesoros que he conseguido arrebatarle al resto de las mujeres que, cartera en mano, arrasan con todo aquello que esta al alcance de sus bolsillos.


Lo más importante para sobrevivir en esa jungla llamada Portobello, es armarte de paciencia y tener claro que es lo que estas buscando, porque si no tienes un objetivo claro lo más probable es que cuando consigas salir de allí te encuentres que has comprado una maleta antigua, un sombrero de época, unos anteojos, un abrigo de pieles y un par de botas de segunda mano. Existe la posibilidad de ir a pasear, cotillear y disfrutar de una tiendas con tanto encanto que te dará la sensación de estar en otra época, pero entonces mi consejo es que no vayáis el sábado ( las tiendas abren todos los días, pero el mercadillo sólo lo montan el sábado).

Cuando bajas del metro, tienes que dejar que el río de gente te guíe hacia la calle donde vas a pasar las siguientes 3 horas (mínimo). Si eres rápido podrás entrar en el starbucks que, tan acertadamente, han abierto justo antes de que la locura de las tiendas empiece. Cuando tienes tu café entre las manos sin saber porqué, te da la sensación de que te lo vas a poder tomar con calma...Pero no te confíes porque la locura colectiva por las compras que se huele en el ambiente hará que tires ese café antes de terminarlo o que te lo termines de un solo sorbo para poder tener las manos libres.

IMPORTANTÍSIMO: En Portobello se dan cita la mayoría de los carteristas de Londres durante el fin de semana, ya que saben de sobra lo fácil que resulta meter la mano en los bolsos de los turistas que sin darse cuenta a la salida de las tiendas se dejan abierto. Así que lo mejor es llevar un bolso pequeño, bandolera, colocado delante y con cremallera.

¡¡¡Ahora estáis listas para comprar!!!!

Según llegáis a la calle de Portobello tenéis que fijaros bien en las casitas de colores que os dan la bienvenida a la parte más clásica de Londres. Es una zona donde vive gente con dinero y eso se nota. Mi casa favorita es una de color morada, sigo esperando que la pongan en venta, jejeje...


Lo normal es que haya alguien tocando algún instrumento o grupos jóvenes que animan el ambiente con sus guitarras. y justo donde se colocan ellos, comienza la locura. Al principio la mayoría son tiendas de antigüedades, y si sabéis distinguirlas de las cosas viejas, podéis encontrar auténticas maravillas...como yo no entiendo nada no suelo detenerme mucho en esa zona.


Más adelante tenéis un pequeño mercadillo en forma de U, donde hay que coger aire antes de entrar y tener claro que os tenéis que hacer fuertes si queréis parar en alguno de sus puestos. Pero merece la pena revolver entre las cositas que tiene, porque hay collares, anillos y pulseras muy bonitos, bolsitos, libros "viejos" que no se si antiguos, y los precios no están mal. SIEMPRE SE PUEDE REGATEAR. Aunque no ceden demasiado, algo podéis bajar los precios.



Si continuáis paseando llegaréis a otra calle llena d tiendas, pero ahora la mayoría son de ropa y algunos puestos de comida. Aquí es donde yo suelo perder más tiempo. Hay varias tiendas que siempre visito, y rara es la vez que no me compro algo.

1- Appletree boutique:

Es mi tienda favorita. Sus precios son algo altos, pero totalmente justificados porque su ropa es muy original y la calidad es bastante buena. Siempre tiene una parte con prendas en oferta y os aconsejo que lo miréis todo, porque tiene cositas muy interesantes.


Esta es la compra de mi última visita...No pude resistirme a tener esta chaqueta de corte militar ( aunque a mi me recuerda más a una chaqueta de domador de circo) en cualquier caso !me encanta¡.

2- Pili & Mili:

Es una tienda un poco cara para lo que ofrecen, pero merece la pena echar un vistacito porque puedes encontrar cositas interesantes. Te dirán que sus diseños son únicos, pero lo cierto es que puedes encontrar cosas parecidas en otras tiendas. Lo que es indiscutible es que la calidad de algunos de esos diseños son bastante buenos...Por eso hay que mirar bien lo que se compra. Puede ocurrir que pienses que llevas algo exclusivo y un poco más adelante lo veas colgado en los puestos de la calle ( insisto que de calidades inferiores..pero sus precios también lo son, la elección aquí es personal de cada uno)

Este vestido de la mariposa es de mis favoritos, el tejido es muy suave y los acabados perfectos..pero me costó unos 50€. Que cada una se cree su propia opinión.

3- Fussy Nation:

Es una tienda de "variaditos". Puedes encontrar desde postales para felicitar los cumpleaños, hasta vestidos de fiesta, pasando por libros de cocina y zapatos como los de Mary Poppins. En esta tienda me compré mi cartera actual y el neceser que uso en todos mis viajes. Los precios varían muchísimo en función de lo que mires. La ropa es cara, pero el resto esta bien.


Se que hay más tiendas en las que entro siempre, pero la verdad es que no os puedo dar los nombres ahora mismo, porque no los recuerdo (pero en mi próxima visita de Enero estaré bien atenta). En cualquier caso, si es vuestra primera vez, dejaros llevar por los escaparates...No os centréis sólo en lo que yo os digo, porque seguro que así os estaréis perdiendo tiendas que merece la pena visitar.

Después de entrar en un millón de tiendas, de gastarte las libras que traías y las que no traías también, de olvidarte de comer con la excusa de que ya lo harás más adelante y ese "adelante" nunca llega, y de sentir un dolorcito en los pies como el que se tiene tras una noche de fiesta sobre unos tacones...llega el momento de hacer un alto en el camino y coger fuerzas, porque unos pasos más y te encontrarás sumergido en un mar de prendas de segunda mano, diademas, tocados, vestidos, zapatos, pieles, gorros, gorras, gorritos, guantes, música, camisetas, pelotas de goma que al tirarlas al suelo se expanden ( cosas de chinos..) cualquier cosa que se te pase por la cabeza lo puedes encontrar allí. Así que digo muy en serio que cuando estés llegando al final de la calle te tomes un respiro, porque sino lo haces no vas a disfrutar de la mejor parte.



Estas son mis últimas adquisiciones en uno de los puestos del mercadillo y creo que son una pasada. En mi visita en Mayo me compré dos pares de manoletinas que no me he quitado durante todo el verano.

A partir de este momento, pocos consejos te puedo dar...REGATEO, REGATEO Y REGATEO..eso no lo olvides. Déjate llevar pero con control, no se que pasa en Portobello pero llega un punto en el que empiezas a ver que todo te gusta y sabes de sobra que eso no es verdad, solo producto de tú imaginación. Así que cuando veas que tienes entre las manos unas botas de cowboy de piel de serpiente moradas de segunda mano y te estas planteando preguntar su precio ha llegado el momento de marcharte...Más vale una retirada a tiempo.

Para reponer fuerzas yo suelo ir a un irlandés que esta en la misma calle del mercadillo, siguiendo de frente que se llama "The Elgin" ( 96 Ladbroke Grove, Notting Hill). La carta no es muy amplia, pero está lo suficientemente cerca del mercadillo como para no tener que andar demasiado cuando ya no puedes más; y la comida esta buena...Básicamente es carne, carne y pescado..Pero para reponer fuerzas esta bien. Los precios son razonables, el personal es encantador y la decoración la han puesto nueva hace poquito y merece la pena sentarse un ratito a descansar.

Por mi experiencia se que Portobello agota hasta el mas pintado...Así que después de un día entero de compras, lo mejor es volver al hotel, relajarse un poco mientras repasas todo lo que te has comprado ( y estoy segura de que verás cosas de las que ni siquiera te acordabas), y tras una duchita relajante, arreglarte un poco e irte por la zona de Carnaby Street para cenar y tomarte una copita. O ir a Rainforest Café, 20 Shaftesbury Avenue, ( restaurante con menú para celiacos, que tiene animales animados por todo el local y unas sillas que son las patas de un avestruz, las ancas de una rana o las pezuñas de un león) y comerte un buen costillar con puré de patatas y después salir por la zona a tomarte algo. En el tema de la noche londinense estoy aun muy verde...pero es un aspecto en el que tengo pensado investigar en mis futuras visitas. Cuando vas pocos días hay que elegir, turismo y compras o turismo y salir o compras y salir. Para mí lo ideal es la última opción, pero por ahora no ha sido posible. Todo se andará.

Aquí finaliza un día perfecto en Londres para una loca por las compras.

Espero que os haya gustado. Mañana más y mejor.

!!!CIAO CIAO ¡¡¡